¿Qué es una I.P.O. en bolsa?

Las Ofertas Públicas Iniciales (IPO, por sus siglas en inglés) son una forma en la que las compañías privadas se hacen públicas, esto lo consiguen al vender acciones en la bolsa de valores. Durante este proceso, una compañía empieza a vender acciones a inversionistas a cambio de dinero, lo cual les permite obtener fondos para expandir su negocio y crecer hacia nuevos mercados.

Una de las principales ventajas de una IPO es que permite a las empresas obtener grandes cantidades de dinero en poco tiempo. Además, al vender acciones, las empresas pueden obtener una valoración de su negocio en el mercado, es decir, que se pone un «valor/precio» a la empresa, lo que puede ser útil a la hora de solicitar préstamos o préstamos externos.

El proceso de una IPO comienza con la elección de los bancos colocadores, que son las entidades encargadas de ayudar a la empresa en el proceso y a establecer el precio al que saldrán a cotizar las acciones. Una vez establecido el precio, se realiza una subasta para vender las acciones públicamente.

Después de una I.P.O., las acciones de la empresa comienzan a cotizar en el mercado, lo que significa que los inversores pueden comprar y vender las acciones en cualquier momento. Además, los accionistas mayoritarios tienen derecho a voto en la asamblea anual de accionistas y a recibir dividendos si la empresa decide pagarlos.